Le gustaba lo impredecible del arte de soñar.
Al caer de la noche y de la pesadez de sus párpados no sabía que nueva aventura podría esperarle en el descansar de su conciencia y en el olvido de vivir. Sólo se entregaba a la penumbra de su almohada con la calma del que ha dormido toda su vida y sabe que no es más que una muerte breve, un paso entre un día y otro.
Entre un mundo y otro.
Soñó más cuando fue niña.
Era algo diario, disfrutable y con mejores cimientos en la memoria de lo que eran los sueños de su presente rutinario. Ese ir y venir del día adulto le había hecho cansarse más y soñar menos…dormir mejor procurando olvidar. Pero aún saboreaba las delicias de los sueños cuando se presentaban en su mente perturbada por la oscuridad de una noche.
Era aún un gran y precioso misterio. El hecho de poder sufrir, llorar, reir, cantar, bailar, amar y ser tan feliz en algo que sólo estuvo en su mente un lapso de tiempo poco predecible…en medio de la nada de su noche. Misterio que la deleitaba cuando sucedía.
Se había visto en aquel cerro de helado y destellos de Sol radiante que había imaginado tantas veces en medio del valle que le vió nacer… sufrío perturbadamente con aquel cuento recurrente de terror con dos abuelos, un bosque y los gusanos emanando por doquier… palideció ante la felicidad ajena de un evento inesperado con la persona menos pensada… logró materializar los besos que no se había atrevido a robar… lloró al presenciar muertes que ni temía ni quería…
Todo tan verídico, tan real en su película mental y tan sentido…
Tan reales podían llegar a ser, que alegraban un día o cubrían de penumbra un amanecer a preferencia y disposición. Hacían temblar los nervios menos pensados y lograban invocar reflexiones sin sentido o trascendentes…
Siempre siempre
Siempre le gustó soñar…
1 comment
Un escrito en tercera persona: parece que hay cierta comodidad, tanto de vos para escribirlo como del texto para dejarse. Una melancolía hermosa me dejó el texto: de esa que nos hace evocar una “pintura” más colorida, un sueño de colores.
Un abrazote